Empezó a darse a conocer a la vida social por su puesto laboral, periodista radiofónico deportivo especializado en todo lo relacionado con el Real Madrid, lo cual ya te da una predilección por el mundo rosa. Pero fue su noviazgo con Terelu Campos, la hijísima de la grandísima presentadora y manipuladora de
quasitodas las amas de casa de este país Mª Teresa Campos, lo de
grandísima lo digo por el tamaño, lo que le llevo al papel cuché de todas las revistas y televisiones nacionales. Pensemos en que triunfó el amor y no las
influencias y la posición privilegiada de Terelu lo que hizo a Pipi, nuestro Pipi, llegar a este punto. Tras un tiempo de idílico romance llegaron los primeros roces, ya que un jugón no es hombre de una sola hembra, como dijo un gran sabio
"aunque tengas coche de vez en cuando hay que permitirse coger un taxi". La hijísima cada vez intentaba atarle más en corto pero ya se sabe que un fiestero de este calibre siempre tiene ansias de libertad. Tras este tira y afloja la relación se finiquitó, llegando a realizar declaraciones del tipo
"Con Terelu me he sentido como en una cárcel".
Ahora Pipi se sentía nuevamente libre, el estado ideal para un ser de su especie. Por lo cual entro en un bucle de ligoteo con
pivones de lo más variado, todas de notable para arriba.
En esta vorágine de fiesta y salsa rosa le llevó a que le echaran de su trabajo en la radio, y a su participación en el tristísimo programa La isla de los famosos, y no nos podíamos olvidar del
Pipón de Pipi... sin comentarios. Todo esto hasta que llegó la apoteosis y se convirtió en un verdadero jugón al enchocharse con nada más y nada menos la pornostar
Lucía Lapiedra, protagonista de éxitos del calibre de Pasión protagonizada por Rafa García, hermanísimo de Dinio.
Y en esas estamos, por todo esto y mucho más Pipi es nuestro primer Person de la semana, de aquí en adelante ni el propio Pipi sabe lo que le depara la vida...
